En casa nos encanta la comida asiática y llevábamos muchos días sin probarla, así que se me ocurrió hacer el pollo que íbamos a comer al estilo chino.
Ingredientes:
(para 2 personas)
- 2 pechugas de pollo
- 2 limones
- un vaso de caldo de pollo
- un vaso de agua
- 50 gr. de anacardos
- 2 láminas de gelatina neutra
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- salsa de soja
- aceite de oliva
- sal
- 2 cucharadas de café de glutamato sódico
Preparación:
En primer lugar cortamos las pechugas en daditos pequeños. Colocamos el pollo troceado en un recipiente y le echamos sal y lo cubrimos con salsa de soja. Dejamos marinar la mezcla durante media hora en la nevera.
Pasada la media hora freímos el pollo en una sartén con un chorrito de aceite y reservamos.
En la misma sartén echamos el vaso de caldo de pollo y el zumo de un limón. Dejamos que se caliente a fuego medio. Mientras calentamos el vaso de agua, bien en microondas o en un cazo y diluimos las hojas de gelatina. Cuando se hayan diluido lo echamos en la sartén, le echamos las dos cucharadas de azúcar y removemos bien hasta que vaya adquiriendo una textura más espesa y un poco gelatinosa. Añadimos las dos cucharadas de glutamato sódico (eso hará que sepa a comida china de verdad), los anacardos y el otro limón cortado en rodajas. Removemos.
Cuando la salsa haya adquirido la textura deseada la echamos sobre el pollo y a comer!!
De verdad que no tiene nada que envidiar al pollo al limón que podemos comer en cualquier restaurante chino.
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