El solomillo de cerdo es uno de esos platos que siempre te sacan de un apuro porque en mi opinión queda bien con todo, cualquier cosa que se te ocurra puede quedar bien acompañando un buen solomillo. La combinación con el salmón ahumado y el queso de cabra en principio puede resultar extraña, sin embargo, en casa nos ha parecido un contraste genial. Además la receta no puede ser más fácil y más rápida.
Ingredientes:
(para 2 personas)
- medio solomillo de cerdo (salen unos 6 medallones de un dedo de grosor)
- 150 gr. de salmón ahumado
- 150 gr. de queso de cabra
- 1 copa de brandy
- 125 ml. de nata liquida para cocinar (un brick)
- sal
- pimienta
- aceite de oliva
Preparación:
Primero prepararemos la salsa ya que el solomillo se hace en la plancha y es un momentito de nada.
En un cazo, con el fuego no muy alto, derretimos primero el queso de cabra sin piel, cuando ya casi esté totalmente disuelto le añadimos el brandy y la nata liquida. Removemos bien hasta que adquiera la textura deseada y salpimentamos.
Cortamos el solomillo en medallones de más un menos un dedo de grosor. Salpimentamos y los marcamos en la plancha bien caliente con una gotita de aceite. Servimos con una loncha de salmón ahumado encima de cada medallón y salseamos por encima.
Nosotros lo acompañamos de pasta rellena de parmesano.
A disfrutar!!
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